jueves, 20 de mayo de 2010

A propósito del Inca


Hoy Presentamos:


Las páginas de internet, prensa y televisión abarrotaron este año los titulares con el trágico desenlace de la tóxica y enferma relación del pugilista venezolano Edwin "Inca" Valero y su esposa. Para quienes no saben la historia, les resumo el cuento: El inca estaba enfermo del alma. Su esposa, también. También su madre, y muy posiblemente toda su familia. Edwin se abrió camino por la vida a punta de coñazos...y a coñazos acabó con su destino y el de su mujer. Mejor dicho, a puñaladas a ella, ahorcándose él.

Esta tragedia familiar ha desatado en mi patria una ola de reacciones de toda índole en defensa de la mujer y en contra de los asesinatos a mujeres en manos de su pareja: "femicidio", le llaman las feministas a este acto.

Ahora, me pregunto yo: quién maltrata? Fue el inca solo solito el que le arruinó la vida a esa pobre mujer? Por qué no se retiró antes? Por qué no se dio a respetar? Qué pasó en esa habitación de hotel esa noche, sólo ellos lo sabrán desde el sepulcro ahora.

Lo que sí sé, es que las relaciones son de DOS. No de uno. Ergo, las acciones y reacciones son recíprocas.


Psicológicamente se dice que las únicas víctimas reales son los niños y quienes mueren a manos del hampa, o en accidentes. Los demás, somos responsables de los que nos pasa. Así que el maltrato no existe, a menos que concedamos permiso. Esto quiere decir, que si alguien me maltrata, es porque yo me dejo.

Si a ver vamos, las mujeres jodemos bastante tambien. No hace falta ver cuántas tipas se preñan a propósito para amarrar a sus hombres, los castran y vejan también. Cuántas madres no manipulan a sus exmaridos con los hijos? Cuántas no critican a sus novios por ganar menos que ellas, o tener menos título académicos que ellas en sus currículos? Cuántas no se le meten por los ojos a tipos casados y destruyen familias? Cuántas perras no andan por ahí chuleándose a los hombres, y practican una especie sutil de prostitución? Cuántas tipas no andan por ahí, enfermas, hostigando y acosando a sus hombres como si fueran ellos un ilegal de Arizona, y ellas algún policía de los USAs?. Cuando Lorena Bobbit le cortó el pene a su esposo todo el mundo hizo una fiesta...

La revolución industrial nos ha empujado a olvidarnos como mujeres de nuestra propia esencia de niña, guerrera, madre, anciana, y muchas de nosotras (no lo neguemos) andamos como machos compitiendo con los hombres dentro de su propio territorio, cuando nuestras armas de vida siempre serán mucho más sutiles y de un alcance más poderoso.

Creo, que es hora de equilibrar las cargas.

Panas, no soy feminista una mierda. Soy FEMENINA. Ergo, amo a los hombres. Y luego de tanto coñazo por la vida y experiencia, he aprendido que he sido responsable de todas mis circunstancias: pasadas y actuales. Y todas ellas me han llevado a aprender a amarme a mí misma tal cual soy. Todo esto me lleva a asumir una posición diferente a la que los medios y la sociedad "civil" anda pregonando en estos días.

Es por esto, que ese humilde, desordenado, bipolar y altamente contradictorio blog alza su voz virtual en denuncia del irrespeto a nosotros mismos, y en defensa de relaciones sanas y de crecimiento. Sin ánimos de sonar misógina, y a fin de sonar igual de extrema que las campañas feministas actuales, he decidido que mi blog se pronuncia en este caso en contra del maltrato AL HOMBRE.

NO AL MACHICIDIO!!

AMEMOS, AMÉMONOS Y ENSEÑEMOS A AMAR...DEJEMOS LA RIDICULEZ DE UNA VE Z POR TODAS!!! No más relaciones enfermas!




PD: Mis respetos y condolencias a las familias de Edwin Valero y su esposa,
Jennifer Carolina Viera. Y paz a sus almas.

2 comentarios:

  1. A veces se suele olvidar que todo problema tiene al menos 2 caras, y que tanto unos como otros solemos terminar solucionandolos de la forma errada cuando ya no hay tiempo para solventar las cosas, no creo que el inca haya sido el demonio reencarnado ni que su esposa haya sido la virgen maría ambos tenían un problema y ninguno encontró la forma correcta de solucionarlo por desgracia la muerte que siempre esta ahí detrás de cada esquina aprovechó para solucionarlo por ellos.

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  2. Gracias por tu comentario, Hernán. Esperemos que los que humildemente podemos rectificar en nuestras vidas, nos encaminemos hacia relaciones cada vez más sanas, de respeto y de apoyo. Casos como el de la familia Valero-Viera nos revelan cuánto aún nos queda por trabajar y superarnos como seres humanos.

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